El Fotógrafo en
la noche
La noche es sinónimo
de descanso, dormir o quizás para ir de fiesta, pero en el argot fotográfico la
noche significa mucho mas que eso.
Cuando un fotógrafo
aficionado comienza su andadura en este tipo de fotografía, no es fácil “justificar”
una fotografía en medio del campo en total oscuridad, suele decirse, “tu estas
loco” u otras muchas expresiones de incomprensión. Pero la fotografía nocturna
tiene el don de transmitir aquello que la gente no ve por costumbre, y es por
ello que cuando el aficionado en sus primeras tomas empieza a ver un auténtico espectáculo
nocturno que de alguna forma te va picando por dentro sintiendo así la necesidad
de mejorar y de profundizar en esa noche y en las posibilidades que te da la
naturaleza en buscar aquella foto que deseas y que continuas de manera incesante
hasta conseguirla.
Para conseguir una
buena fotografía nocturna vas buscando rincones cada vez mas espectaculares,
mas recónditos, mas alejados de la contaminación lumínica y es en esos lugares
donde uno mismo se encuentra en paz o en una simbiosis con aquello que nos
rodea. En el ambiente se puede apreciar el silencio alternándose con el sonido
de animales, el viento que sopla, el movimiento de los arboles y muchos otros
sonidos que se nos escapan de nuestros sentidos cuando no somos capaces de ver más
allá de nuestros pies y esto hace que la fotografía nocturna sea un mundo
fabuloso donde explorar nuevas sensaciones, ver la naturaleza desde una
perspectiva totalmente diferente a la que estamos acostumbrados a ver, oír y
sentir.
Tal actividad
puede desarrollarse en diversos modos, las más comunes son las del centro galáctico
de la vía láctea en distintos paisajes, pero la fotografía nocturna va mucho más
allá, una de las fotografías que más me impactaron fue captar el movimiento de
las estrellas, las fotografías circumpolares consiste en alargar el tiempo de exposición
en la medida que creamos oportuno, con la cámara orientada hacia la estrella
polar, de esta forma captaremos el movimiento de rotación que realiza la tierra
con respecto a las estrellas.
Aquí muestro
una foto del Castillo de Otiñar, en la cual fue toda una sorpresa para mí, pues
era la primera vez que veía algo así ya que aún no había sido capaz de
conseguir una foto que me complaciera y me encontrara satisfecho con el resultado
al realizar circumpolares.
Otras muchas
opciones que nos ofrece la noche es captar los rastros de luz de los coches por
una carretera, congelar los rayos de tormentas y contemplar la vía láctea en
sus distintas fases a lo largo del año entre otras.
Cuando la gente ve fotografías del firmamento con tantas estrellas es como algo mágico, retirarse de los núcleos de población a lugares alejados merece la pena. En Jaén existen numerosos lugares para contemplar la bóveda celeste. Uno de los más destacados son los campos de Hernán Perea en la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, declarado paraíso starlight. Su contaminación lumínica es casi nula ofreciendo una visión excepcional en esta zona en la que se puede observar en algunas ocasiones el efecto Green light, que no es otra cosa que un tono verdoso en el cielo. Otros muchos lugares de la provincia también a destacar son por ejemplo Sierra Morena y la Sierra sur de Jaén que han sido declaradas paraíso straligth.
Sierra Morena constituye una de las mayores cadenas montañosas de la provincia pues abarca desde aldea hermosa y Montizón más o menos hasta el límite de provincia con Córdoba, en la que podemos encontrar dos grandes parques naturales, el de la Sierra de Andújar y el Parque natural de Despeñaperros. En ella existen varias zonas para el avistamiento del firmamento como son por ejemplo: El área recreativa “la carnicera” en el termino de Navas de san Juan, el área del parque de La Cimbarra y también por la zona de Andújar el camino del santuario de la virgen de la cabeza donde a unos 6 km en adelante nos encontramos el mirador de Mingorramos, en el que a parte de disfrutar de unas magnificas vistas del entorno natural encontraremos un planisferio donde comprobaremos que parte del firmamento estaremos contemplando según la época del año.
El turismo nocturno en Jaén esta en pleno auge, tanto es así que se han instalado varios lugares dedicados a esta actividad, como es el Cosmolarium, un centro de interpretación de la astronomía ubicado en el castillo de Hornos de Segura. La fortificación, data de entre los siglos XII al XIV, y ésta ha sido remodelada y adaptada para su nueva función. Su adecuación como Centro de Interpretación Astronómica se debe a la excelente situación por su altitud, escasa densidad de población y excelente visibilidad, para la observación y contemplación de los cielos. Son muy pocos lugares de la Península Ibérica que poseen tales características, debido a la pureza de sus cielos.
Cosmolarium cuenta con varias salas de exposición en torno a la astronomía, un planetario para la simulación del cielo y una proyección de películas full-dome, además de poder disfrutar de unas impresionantes vistas sobre el pantano del Tranco.
En la ciudad de Úbeda se encuentra otro planetario, gestionado por la Asociación Quarks e instalada en el Hospital de Santiago, un edificio Patrimonio de la Humanidad. Esta misma entidad gestiona el Centro de Divulgación Astronómica “La Fresnedilla”, ubicado en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, en el que se desarrollan actividades educativas, divulgativas y turísticas. Cuenta con un observatorio dotado de telescopios y cúpula de observación que está computarizado para poder ser controlado de forma remota.
Para finalizar animo a todas las personas a disfrutar del paisaje nocturno el cual es más acentuado cuando la luna esta en sus fases crecientes o decrecientes, así como en luna nueva, y si por supuesto disponen de equipo fotográfico y de buenos amigos no duden en coger su cámara y trípode y echarse al campo.
Juan López
Buen artículo Juan, muy instructivo e interesante.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias Antonio, me algro mucho de que te haya gustado!!
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